Amarres de amor para encontrar pareja
El deseo de ser amado no es suficiente para encontrar el amor correspondido.
Aunque uno puede tener el deseo de estar en una relación amorosa, no
significa que esto realmente tendrá lugar. Hay quienes, podrían encontrar difícil
encontrar a alguien con quien compartir su vida.
Como resultado de esto, esta área de su vida podría acabar
eclipsando casi todas las otras áreas de su vida. Este estado de vida consume
mucho tiempo ya que pasarás pensando todo el tiempo en porqué no encuentras el amor de tu vida. Y muchos
terminan creyendo que no nacieron para amar y ser amados. Y pierde el interés en disfrutar la vida y ve
las cosas en blanco y negro y todo lo que siente es angustia, desesperación y soledad; terminando
siendo víctima del dolor.
Retroceder el tiempo y ver las relaciones anteriores.
Si echamos una mirada al pasado podríamos darnos cuenta que
tuvimos relación sentimental con algunas cuantas parejas, pero tuvimos temor de
llegar más lejos y eso hizo cambiar de parecer a quien estaba dispuesto a
compartir su tiempo y vida con nosotros.
El temor es necesario en la vida, porque nos previene de
cometer errores; que no sanaran fácilmente.
Pero tener temor en exceso es dañino para una relación amorosa. Quien no
arriesga no experimenta lo bueno y lo malo de la vida.
No hay nada mejor que estar al lado de alguien que amamos ynos ama y compartir cada segundo de vida. Tener la esperanza de llegar hasta el
final de nuestros días con quien elegimos como compañero de la vida. Caminar por los parques, compartir un helado,
reír de un mal chiste y llorar para despedir a quien amamos de este mundo.
Algunas causas de no encontrar pareja para compartir tu vida.
Timidez: alejarse de las personas porque no sentimos que
cabemos en su entorno, alejarnos de la sociedad nos limitará a encontrar a la
persona amada.
Baja Autoestima: Tenemos que saber que todo ser humano fue
creado con las mismas condiciones y nadie tiene más que nadie. Para poder encontrar a esa persona amada es necesario
que empecemos por amarnos a nosotros mismos; porque así como nos tratamos,
trataremos a los demás.
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