Palabras de un corazon despreciado
Mi vida sin ti, un corazón y una mente desesperados por el amor
La Angustia, la desesperación, el dolor y la ansiedad; pesan
más que la arena del mar. Te busco y no te encuentro, te llamo y no respondes y
tu vos ya no escucho más.
Prefiero ser condenado a morir de inmediato, que vivir con
la pena de no tenerte en mis brazos de nuevo. Estoy dispuesto a vivir encarcelado por tu
amor, que vivir libre en brazos de la soledad de tu ausencia.
De nada me sirve ser un atleta que ha ganado miles de
premios y ser el más veloz del mundo, sino puedo alcanzarte. Te has adueñado de mi mente, mi corazón, mi
voluntad. No tengo control sobre mis
pensamientos.
Mi mente está constantemente recordándote y pidiéndome a
gritos que te busque, porque te necesita como los peces al mar. Sin ti las luces se apagan, la velas dejan de
alumbrar, las horas pasan con la cabeza agachada y los segundos corren para no
saber lo que acontece en mi corazón.
¿A quién he de culpar por tu partida? ¿Acaso fui yo; o fuiste
tú? No es momento para buscar culpables, porque lo que sucedió ayer no existe
más.
Quisiera matar de una vez el sentimiento que ciento por ti,
pero mi corazón se opone y te defiende hasta la muerte. Mi corazón y mi mente
se han unido para luchar en mantenerte siempre presente en todos mis días.
Luchar contra la mente y el corazón es una guerra perdida,
una batalla sin provecho y sin victoria.
Es mejor luchar para encontrar la manera de hacer volver a esa persona
que amas y que hace tus días
felices.
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